Se entiende como un ejercicio puntual de autocuidado, de pausa, de mimo y desconexión.
Ese brillo rápido, saludable y descansado que todos buscamos tiene un nombre: efecto Glow.
Se consigue activando la oxigenación, el colágeno y la circulación a través de distinta aparatología y maniobras manuales, aplicando de la forma más cuidada y relajante posible cosmética de calidad adaptada a cada piel.
La calidad del cosmético marca una gran diferencia en estos tratamientos. Los productos de alta gama penetran mejor, potencian los efectos de la aparatología y aportan resultados reales y duraderos. Además, son seguros incluso para pieles sensibles, y prolongan ese efecto glow más allá de la sesión.
En pocas palabras, los tratamientos de sesión única funcionan porque combinan eficacia, comodidad y placer. El Ritual Glow no solo deja tu piel radiante y tonificada, sino que también te regala un momento de cuidado personal que se nota y se siente. Una hora que tu piel agradecerá y que tú recordarás.
Nuestro Ritual Glow es un ejemplo de ello, combinando radiofrecuencia, luz LED roja, masaje relajante cráneo facial y cosmética personalizada para un efecto visible desde la primera sesión.
Un regalo perfecto para cada ocasión o por qué no… para ti…